Las noches con nuestra hija Daniela (23 meses) eran una locura. Podía tener despertares cada 1'30hr, y para volverse a dormir, brazos (podíamos estar perfectamente 1 hora cada vez). Al final siempre acababa en nuestra cama, en la que también dormía fatal, y la situación empezaba a ser insostenible. Gracias a Olga, hemos conseguido dejarla despierta en su cuna y que se acabe durmiendo sola (sin lloros, nunca la dejaríamos llorar), pasando a tener 1 despertar, de solo 5-10 minutos. Muchas gracias Olga por tu dulzura y paciencia, siempre te recomendaremos.
Las noches con nuestra hija Daniela (23 meses) eran una locura. Podía tener despertares cada 1'30hr, y para volverse a dormir, brazos (podíamos estar perfectamente 1 hora cada vez). Al final siempre acababa en nuestra cama, en la que también dormía fatal, y la situación empezaba a ser insostenible. Gracias a Olga, hemos conseguido dejarla despierta en su cuna y que se acabe durmiendo sola (sin lloros, nunca la dejaríamos llorar), pasando a tener 1 despertar, de solo 5-10 minutos. Muchas gracias Olga por tu dulzura y paciencia, siempre te recomendaremos.... Collapse