Cuando contacte con Olga, estaba desesperada porque mi hija de 21 meses se dormía al pecho y se despertaba cada 30-40 minutos a pedir pecho durante toda la noche. No dormía de seguido más de dos horas, y con suerte. El día que me decidí a escribirle a Olga, no creía que me iba a cambiar tanto... Solo sus primeros consejos antes de poder concertar una cita, ya me tranquilizaron, entendía como me sentía y los miedos que tenía. Olga estaba tan solicitada que no pudo atendernos hasta ahora, noviembre. Cuando empezamos con ella, habíamos puesto en practica alguno de los consejos que nos había dado, y ya habíamos conseguido que mi hija durmiese sin pedir teta tantas veces. Después de trabajar con ella, mi hija se duerme en su cuna, cantando y charrando tan tranquilamente. Algo que no nos imaginábamos. Ha sido un verdadero placer trabajar con Olga y escuchar sus consejos, es un amor de persona y entiende cada situación. Mil gracias por todo, eternamente agradecida.
Cuando contacte con Olga, estaba desesperada porque mi hija de 21 meses se dormía al pecho y se despertaba cada 30-40 minutos a pedir pecho durante toda la noche. No dormía de seguido más de dos horas, y con suerte.
El día que me decidí a escribirle a Olga, no creía que me iba a cambiar tanto... Solo sus primeros consejos antes de poder concertar una cita, ya me tranquilizaron, entendía como me sentía y los miedos que tenía.
Olga estaba tan solicitada que no pudo atendernos hasta ahora, noviembre.
Cuando empezamos con ella, habíamos puesto en practica alguno de los consejos que nos había dado, y ya habíamos conseguido que mi hija durmiese sin pedir teta tantas veces.
Después de trabajar con ella, mi hija se duerme en su cuna, cantando y charrando tan tranquilamente.
Algo que no nos imaginábamos.
Ha sido un verdadero placer trabajar con Olga y escuchar sus consejos, es un amor de persona y entiende cada situación.
Mil gracias por todo, eternamente agradecida.... Collapse
El día que me decidí a escribirle a Olga, no creía que me iba a cambiar tanto... Solo sus primeros consejos antes de poder concertar una cita, ya me tranquilizaron, entendía como me sentía y los miedos que tenía.
Olga estaba tan solicitada que no pudo atendernos hasta ahora, noviembre.
Cuando empezamos con ella, habíamos puesto en practica alguno de los consejos que nos había dado, y ya habíamos conseguido que mi hija durmiese sin pedir teta tantas veces.
Después de trabajar con ella, mi hija se duerme en su cuna, cantando y charrando tan tranquilamente.
Algo que no nos imaginábamos.
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