Hemos conseguido que nuestro hijo de 9 meses y medio pase de despertarse cada 45-60’ por las noches a hacer solo dos tomas nocturnas. Para mi lo más importante es que Olga ha respetado en todo momento nuestros ritmos y no ha intentado “presionarnos” para avanzar por donde no nos sentíamos cómodos. La hora de dormir por fin no es una lucha que dura más de 45’.
Hemos conseguido que nuestro hijo de 9 meses y medio pase de despertarse cada 45-60’ por las noches a hacer solo dos tomas nocturnas. Para mi lo más importante es que Olga ha respetado en todo momento nuestros ritmos y no ha intentado “presionarnos” para avanzar por donde no nos sentíamos cómodos. La hora de dormir por fin no es una lucha que dura más de 45’.... Collapse